La educación se refiere al proceso de aprendizaje y socialización que los seres humanos llevamos a cabo a lo largo de nuestras vidas. Es el mecanismo a través del cual se obtienen conocimientos y valores, se desarrollan hábitos, habilidades, costumbres, creencias, formas de actuar, entre otros.
Las principales figuras de autoridad en la educación de los niños y jóvenes son los padres y todos aquellos docentes que, además de dominar las herramientas para la enseñanza, son capaces de ser inspiración en la formación académica y personal.
Los conocimientos adquiridos, bien sea que se aprendan a través de la familia, las experiencias, la educación formal o informal, son los que nos permiten formarnos de manera integral y nos permiten saber cómo actuar en nuestro día a día y ante diversas circunstancias.
En este sentido, la educación es un factor fundamental tanto para las personas como para la sociedad en general, por una parte porque determina conductas y, por otra, porque forma parte de la identidad cultural y del desarrollo constante de la sociedad y, por ende, de un país.
Esto conlleva a destacar la importancia de la educación en todos los sentidos e implementar políticas públicas que procuren su acceso, ya que una sociedad compuesta por ciudadanos alfabetizados y educados puede asegurar un mejor futuro económico, político, social y cultural.
Asimismo, la educación ha intentado adaptarse a los nuevos avances tecnológicos que han posibilitado la creación de nuevas herramientas y métodos de estudio a fin de hacer de éste un proceso interactivo, práctico e, incluso, autodidáctico.
La tecnología ha sido clave en este desarrollo porque ha posibilitado el acceso a la información, el intercambio cultural, entre otros. La tecnología ha hecho de la educación un proceso más eficaz.
En el presente se valora más la calidad que la cantidad de conocimiento, de hecho, la importancia de la educación es tal, que organismos nacionales e internacionales, establecen agendas de trabajo en las que se abordan los diversos aspectos relacionados a este tema, a fin de procurar mejorar las bases de la educación y su repercusión social.
Es decir, la educación necesita ofrecer las herramientas y mecanismos justos para que las personas aprendan a aprender, a hacer, a vivir en sociedad, y sean capaces de exigir más de sí mismos siendo conscientes de sus capacidades y limitaciones.
Objetivos de la educación
En el marco de la educación se han propuesto diversos objetivos, los cuales pueden variar según el enfoque bajo los que se determinen. Sin embargo, en términos generales la educación tiene por objetivo alcanzar la continua formación de los individuos y el bienestar de las sociedades en general.
A continuación se mencionan algunos de los objetivos más importantes de la educación:
- Asegurar la formación integral de los individuos.
- Incentivar el razonamiento lógico y crítico desde temprana edad.
- Fomentar la investigación en todas las áreas de desarrollo humano.
- Incentivar la creatividad y demás habilidades que cada persona posea, por ejemplo, artísticas o deportivas.
- Garantizar la formulación de políticas que enfaticen la necesidad del acceso a la educación para todos los ciudadanos por igual.
- Promover la inclusión.
- Incentivar la comunicación, el intercambio de opiniones e ideas, y el uso de los diversos canales comunicativos.
- Educar en valores familiares, sociales, humanos, éticos y morales, entre otros.
- Fortalecer la integración social y cultural.
- Promover el correcto uso y aplicación de las nuevas tecnologías.
- Atender las desigualdades o carencias que puedan presentar los estudiantes. Por ejemplo, de tipo psicológico, familiar, nutricional, entre otros.
- Asegurar mejores y mayores oportunidades de empleo y desarrollo individual.
- Consolidar la identidad cultural.
- Asegurar el desarrollo sostenible que garantice la permanencia de los recursos naturales y el cuidado del ambiente.
Importancia de la educación para el desarrollo de un país
Los países que presentan un mayor índice de desarrollo y estabilidad son aquellos que han tomado la educación como un aspecto fundamental para alcanzar su bienestar social y crecimiento económico.
El conocimiento es una puerta que conduce al desarrollo. Por eso, los países que aseguran a sus ciudadanos mayor acceso a la educación y posibilidades de estudio alcanzan un elevado nivel de progreso, porque cuentan con una población capacitada para responder a las responsabilidades y labores que se presenten.
De allí la importancia de que se establezcan políticas de estado destinadas a la inversión en los planes educativos, con el fin de lograr un próximo crecimiento económico, lo que conlleva a más oportunidades de empleo, mayor competitividad laboral, menor desigual social, mejor calidad de vida, entre otros.
Por su parte, los países que no establecen políticas o planes que aseguren el acceso a la educación se caracterizan por tener sociedades que enfrentan un elevado índice de desigualdad social, baja calidad de vida, pobreza, injusticia, exclusión social y falta de valores.
En ese sentido, los países desarrollados o en vías de desarrollo dependen de la educación en general, así como, de la ciencia y la innovación para poder responder a los cambios sociales del futuro, asegurando su estabilidad económica, política y cultural.
La tecnología y la educación avanzan en conjunto, sin embargo, esto no quiere decir que una pueda desplazar a la otra. Por el contrario, la tecnología ha beneficiado a la educación y ha hecho de ésta un proceso de aprendizaje más amigable, dinámico y eficaz para adquirir conocimiento.
En el presente siglo, la educación eficaz debe ser prioridad de todos los gobiernos a fin de mejorar la vida de todos los ciudadanos y de la sociedad en general. Por ello se habla de una educación que responda a los cambios del futuro, que instituya valores y promueva la creación de modelos de desarrollo sostenibles.
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