Miguel de Cervantes Saavedra fue un poeta, novelista y soldado español considerado como el escritor más importante de la literatura en español tras el éxito de su obra El ingenioso Hidalgo don Quijote de la Mancha, considerada por gran número de especialistas, como la primera novela moderna y una de las más importantes de la literatura universal.
La vida de Miguel de Cervantes se caracteriza por haberse desarrollado en una constante serie de altibajos que le llevaron, desde muy joven, a movilizarse por diferentes ciudades y experimentar gran cantidad de vicisitudes, en especial, debido a sus escasos recursos económicos.
Asimismo, aún existen muchas dudas acerca de cómo fue su vida en realidad y del porqué se vio en la necesidad de tomar ciertas decisiones, esto se debe a la escasa documentación acerca de la vida de Cervantes en torno a diferentes épocas.
Primeros años
No se ha podido confirmar la fecha exacta del nacimiento de Miguel de Cervantes Saavedra. Sin embargo, dada las tradiciones de la época se calcula que nació el día 29 de septiembre de 1547, día de San Miguel, por lo quizás le hayan colocado ese nombre, en Alcalá de Henares, y fue bautizado el 9 de octubre de ese mismo año en la parroquia de Santa María la Mayor.
Sus padres fueron Rodrigo de Cervantes Saavedra (cirujano itinerante) y Leonor de Cortinas (hija de campesinos). Miguel fue el tercer hijo del matrimonio, de un total de siete y de los cuales dos fallecieron aun siendo niños. Sus hermanos fueron, Andrés, Andrea, Luisa, Rodrigo, Magdalena y Juan.
Su abuelo paterno fue Juan de Cervantes, abogado y Juez de la Santa Inquisición, casado con Leonor de Torrealba, hija de una familia de médicos cordobeses. De allí que quizás, Rodrigo, el padre de Miguel, ejerciera el oficio de cirujano pero de manera itineraria en diferentes ciudades como Valladolid, Córdoba o Sevilla, dado a su difícil situación económica y las deudas que tenía.
También se sabe que su abuelo materno fue magistrado y, según investigadores como Américo Castro, se cree que hay una posibilidad de que la familia de Cervantes fuese de origen converso, es decir, que fuesen judíos obligados a convertirse al cristianismo.
En cuanto a la formación académica de Miguel de Cervantes existe poca información, se sostiene que en 1555 ingresó en una escuela jesuita y que no realizó estudios universitarios. No obstante, se dice que su padre se preocupaba por la educación de sus hijos, incluso, tanto Miguel como sus hermanas sabían leer desde pequeños.
En 1566 el joven Cervantes y su familia se establecieron en Madrid y él asistió al Estudio de la Villa, dirigido por Juan de López de Hoyos, pero no se tiene seguridad si fue como discípulo o maestro.
Al poco tiempo escribió sus primeras composiciones poéticas, de las cuales dos fueron publicadas en 1569 por Hoyos en un libro sobre la muerte de la reina Isabel de Valois, esposa del rey Felipe II.
Asimismo, durante esos años, Miguel de Cervantes acostumbraba a asistir a las representaciones de Lope de Rueda, las cuales menciona luego en el prólogo de su obra Ocho comedias y ocho entremeses (1615).
Batalla de Lepanto
En 1569 en Madrid fue condenado a arresto y amputación pública de la mano derecha a un tal Miguel de Cervantes, por haber herido a un hombre llamado Antonio de Sigura y maestro de obras. Esta pena se aplicaba a todo aquel que hiciera uso de armas en las cercanías de la residencia real.
De allí que se crea que esto fue lo que motivó a Cervantes a dirigirse hacia Roma y estar por un tiempo al servicio del cardenal Acquaviva, tras las recomendaciones de un pariente lejano.
Vivió en Italia varios años, y esto quedó evidenciado en diversas de sus obras como Licenciado Vidriera o Sigismunda, cuyos hechos se desarrollan en diversas partes de Italia, con especial atención en Nápoles.
En 1571 se convierte en soldado, al igual que su hermano Rodrigo, de la compañía de Diego de Urbina, que formaba parte de la Armada de la Santa Liga (España, Venecia y Roma) bajo las órdenes de Juan de Austria.
La compañía se enfrentó a las fuerzas turcas y venció en la batalla de Lepanto. Se dice que Cervantes luchó valiente, a pesar de haber sido herido en la mano izquierda y haber perdido su movilidad, lo que le valió que le llamaran “el manco de Lepanto”.
La gloria de haber participado en estos enfrentamientos la transmitió en la segunda parte del Quijote como “la más alta ocasión que vieron los siglos pasados, los presentes, ni esperan ver los venideros”.
Luego, también luchó, pero con menos fortuna, en las acciones de 1572 y 1573 en Navarino, Corfú y Túnez.
Cautiverio en Argel
En 1575, Miguel de Cervantes y su hermano Rodrigo deciden regresar a España, pero el 26 de septiembre la galera Sol, donde viajaban, fue tomada por el corsario Mamí Arnaute, en lo que se conoce actualmente como la Costa Brava, y fueron llevados como prisioneros para Argel.
Por suerte, Cervantes llevaba consigo las cartas de recomendación que le había hecho Juan de Austria para que le fuese retribuido su servicio al llegar a España, y esto llevó a pensar a sus represores que Miguel de Cervantes era una persona importante por quien podrían pedir el pago de un rescate.
Por esta razón su cautiverio fue más prolongado y tuvo que servir como esclavo, protegido del tráfico de cautivos, al griego Dali Mamí.
Cervantes estuvo cautivo por cinco años, en los cuales hizo cuatro intentos de escape frustrados. Finalmente, pudo ser rescatado el 19 de septiembre de 1580, gracias a los padres trinitarios fray Antonio de la Bella y fray Juan Gil, quienes pagaron 500 ducados por su liberación. Llegó a España y se reunió con su familia en diciembre de ese año.
Parte de la experiencia que vivió Cervantes como cautivo en Argel quedó reflejada en sus comedias El trato de Argel, Los baños de Argel y en el relato del Cautivo, que se encuentra en la primera parte del Quijote.
De vuelta a España
Después de pasar varios años fuera de su tierra natal, Cervantes pudo reunirse nuevamente con su familia, la cual pasaba por dificultades económicas por la constante búsqueda de recursos y medios para hacer el pago del rescate de ambos hermanos.
Una vez en España, Miguel de Cervantes abandonó la carrera militar y comenzó a buscar trabajo a fin de poder pagar las deudas familiares, de allí que viajara en 1581 para Portugal, donde se encontraba la corte de Felipe II. Logró que le fuera encomendada una breve misión secreta en Orán. En 1582 volvió a Portugal para solicitar trabajo en América, pero no consiguió nada.
Durante su estadía en Madrid mantuvo una relación amorosa con una mujer casada con Alonso Rodríguez, de nombre Ana Villafranca (o Ana Franca de Rojas), con la cual tuvo una hija llamada Isabel Rodríguez y Villafranca en abril de 1584, la cual reconoció años más tarde.
Luego, en diciembre de 1584 Cervantes se casó con Catalina de Salazar y Palacios, una mujer mucho más joven que él, en Esquivias, un pueblo perteneciente a Toledo. Dicho matrimonio no tuvo hijos ni fue prolongado, ya que Cervantes al poco tiempo comenzó a realizar extensos viajes por Andalucía.
Entre los años 1581 y 1583 se cree que Cervantes escribió Primera parte de la Galatea, dividida en seis libros, por lo general llamada La Galatea, su primera obra de importancia y de carácter pastoril. Se caracteriza por mezclar prosa y versos. Dicha obra fue publicada en Alcalá de Henares en el año 1585, por el librero Blas de Robles, quien pagó una buena cantidad de dinero por la misma.
Antes de La Galatea, Cervantes solo había conseguido publicar algunas de sus composiciones en libros de terceros. Pero, después de esta obra se dispuso a escribir comedias, entre las que destacan El trato de Argel y Numancia. Sin embargo, el dramaturgo español Lope de Vega consiguió hacer obras con mayor éxito que el propio Cervantes.
Últimos años
En 1587, Cervantes viajó para Andalucía tras ser designado como comisario de provisiones de la Amada Invencible, por lo que estuvo viajando constantemente para recoger el trigo y el aceite destinados para los barcos reales.
Sin embargo, al poco tiempo se tuvo que enfrentar en Écija a la Iglesia debido a fallos en sus recaudaciones, por tanto fue excomulgado y en 1592 fue acusado de venta ilegal de trigo, por lo que fue encarcelado en Castro del Río por breve tiempo.
Más tarde, en 1594 Cervantes volvió a Madrid y trabajó como recaudador de impuestos, pero el banco para el que trabajaba quebró y Cervantes fue culpado por, supuestamente, apropiarse parte del dinero público. Por tanto, en 1597 fue nuevamente encarcelado en la Cárcel Real de Sevilla.
Se cree que fue durante este encarcelamiento que Cervantes comenzó a escribir el Quijote, según lo expuesto en el prólogo. Asimismo, no se sabe por cuánto tiempo estuvo Cervantes preso, sin embargo se cree que fue hasta 1600.
Luego, en el año 1604 Cervantes se encontraba en Valladolid, y el cronista Antonio de Herrera y Tordesillas ordenó la publicación de la primera parte de El ingenioso hidalgo don Quijote de la Mancha, obra que conllevó a un nuevo género literario conocido como la novela moderna.
Más tarde, en 1615 fue publicada la segunda parte como El ingenioso caballero don Quijote de la Mancha. Ambas publicaciones gozaron de gran receptividad y éxito. Asimismo, poco antes de fallecer, Cervantes logró concluir su obra Los trabajos de Persiles y Sigismunda, publicada en 1617.
Finalmente, Miguel de Cervantes Saavedra falleció el 22 de abril de 1616, en la ciudad de Madrid, tras padecer de diabetes. Fue enterrado en la iglesia del convento de las Trinitarias Descalzas, según sus últimos deseos.
Obras de Cervantes
De Cervantes se conservan pocas obras, sin embargo el escritor y poeta español llegó a escribir muchos más relatos de los que se citan a continuación, de los cuales no se han encontrado sus rastros.
- Los tratos de Argel o El trato de Argel (1582).
- La Galatea (1585).
- El ingenioso hidalgo don Quijote de la Mancha (1605).
- Novelas ejemplares (1613).
- Viaje del parnaso (1614).El ingenioso caballero don Quijote de la Mancha (1615).
- El gallardo español (comedia incluida en la obra Ocho comedias y ocho entremeses nuevos nunca representados 1615).
- Los trabajos de Persiles y Sigismunda. (1617).
De todas sus obras el Quijote, es decir, sus dos partes, fue la de mayor éxito, y del cual poco pudo disfrutar por fallecer al poco tiempo de sus publicaciones. Se trata de la obra con más traducciones, después de la Biblia, y de mayor representación de la literatura española que dio paso al género de la novela moderna.
Sus dos protagonistas, don Quijote y Sancho Panza, experimentan juntos las adversidades de la vida en un relato de estilo tragicómico, que ha hecho de estos personajes dos íconos de la literatura universal.
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